Copyright foto: Colección Particular Pérez de la Cerda
Post
scritum.- 4 de Marzo.
He demorado
un día la salida de esta carta para dar cuenta del centenario de Murillo. Y en verdad
que mejor fuera no mentarlo. Para lo que fue, lo que hizo y lo que valió el único
bastante alabado pintor de las Concepciones,
la manifestación de ayer en Madrid ha sido mezquina y ruin.
Una función
de iglesia en San Isidro, a la que concurrió el Rey, una procesión formada por
miembros de alumnos de la Academia de San Fernando, la Sociedad de escritores y
artistas. La de Acuarelista, el Circulo de Bellas Artes, la escuela de
Escultura, Pintura y Grabado y la Música y declamación, que desde el templo
espresado fue a depositar coronas, soltar palomas, leer un discurso y recibir
un chaparrón al pie de la estatua de Morillo, mientras de los balcones del
Museo que dan a aquel lado arrojaban flores y versos, todo ello con mediana
concurrencia y ningún entusiasmo, he aquí lo que durante el día se llevó a
efecto.
Por la
noche, la citada Academia de Bellas artes celebró una velada en el salón del
Conservatorio en la que leyeron: un discurso de D. Pedro de Madrazo, poesías
suyas la señora de Rute, Manuel de Palacio y José Velarde, y ajenas, (del duque
de Rivas y el marqués de Valmar) el Sr. Cañete, hubo además buena música y buen
canto de maestros distinguidos y aventajados alumnos del Conservatorio.
Ni el día ni
la noche, ni en la procesión ni en la velada hubo representación ninguna del
Ministerio de las Cámaras, ni del mundo oficial.
Una gran
parte de Madrid (la mayor parte) no advirtió siquiera la festividad de ayer.
Verdad es
que quien había muerto doscientos años atrás en igual día, no era mas que el
primer pintor de España y uno de los primeros pintores del mundo.- Vale
El comercio Año XL Número 13849 - 1882 abril 8
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