Al terminar estas breves consideraciones acerca de los
libros de caballería y sobre la influencia de la educación y de las costumbres
de la época de su mayor preponderancia, deseo hacer aquí entusiasta mención de
una bellísima poesía titulada
El
Trovador, que forma parte de un libro próximo a publicarse, escrito por mi
buen amigo y compañero el poeta conileño D. José Velarde. Esta composición
excede a todo elogio, y en ella se describen, o mejor dicho, se dibujan de un
modo admirable y con la mayor delicadeza, todos los sentimientos, todos los
cuadros sociales y distintos hechos adonde acudía el trovador buscando inspiración
para sus cantos.
Fuente: Internet archive
No hay comentarios:
Publicar un comentario